Tuesday, September 30, 2008

Palabras al cierre

Y con fuerza lance palabras al cielo,
Elevadas por el viento de agosto,
En búsqueda frenética de tu casa,
Raudas viajaron por caminos de hojas secas y escarcha.
Un remolino las arroja a una acequia,
Húmedas nadan en busca de tu calor.
A lo lejos te ven en un paseo dominical,
Pero no te alcanzan, se extravían en tu silencio
Cansadas y agobiadas, reposan en un puente nuevo,
Ausentes de brillo, ya lucen gastadas,
Son palabras triviales, no palabras adornadas,
El calor de la tarde las derriten, sin llegar a tu casa.
Y de noche, al mirar la luna,
Veras lo que queda de ellas,
Ya marchitas y traspapeladas,
Son mis palabras, las jamás escuchadas.

Primavera

Flores de Primavera de árboles que en otoño secarán
Rayos de sol, que las nubes ocultaran.
Así es la vida que existe y la aurora se llevará
Hoy estamos, pero mañana no;
Entonces sólo queda el presente,
El disfrutar de las flores de primavera,
Que el verano con un sol brillante quemará,
Así mismo la vida se gasta,
Y los años con sus veranos la juventud se llevará.
Vive hoy y no mañana, por que la vida es un préstamo
Sin fecha y nunca sabes cuanto durará.

VIVO

Mi mayor propósito de hoy,
Es comenzar a sentir que estoy VIVO,
Que puedo levantarme en la mañana,
Descubrir que no tengo sueño,
Que las fuerzas me acompañan para la lucha diaria,
Que tanto sea el Sol de la primavera o una lluvia de noviembre,
Me afectan por igual porque descubro que soy libre.
¿Y que es la libertad sin sentirse VIVO?
¿Y Que mejor forma de perder la libertad que por un amor?,
Que mejor forma de recuperarla que no sea por el olvido.

Me levanto hoy, y te grito que estoy VIVO y libre,
Que aunque tus ojos me miren, no moriré por ellos,
Que tus cabellos son mi placer, pero no habrá entrega ni renuncia,
Que mi vida me pertenece y la tuya solo es capricho,
De niña bonita, de señorita codiciada.
Por peones rudos, rústicos embobados te anhelan,
Seres trágicos como un Hada te recuerdan,
Y tú, juegas con pétalos de primavera,
Y le quitas el perfume a la mañana.

Proclamo que estoy VIVO,
por las mismas alamedas que me llevan hasta tu casa,
que soy libre no por quererlo, sino por exigirmelo,
cuando el hombre pasa por las calles con armas.
Estoy VIVO, y estoy contento de estarlo,
Con mi corazón sonriendo por ti,
Pero conciente de la distancia que nos separa,
de la noche larga, de las tentaciones vanas.
De belleza derramada en copas,
Bailes que recuerdan a otros bailes,
De hermanos que no lo son de sangre,
Pero te quieren por el hecho de sumarte.
Estoy VIVO, ¿lo sientes?
Es mi corazón libertario, es la nueva creación
Que te he dedicado, mis poemas ya no serán
Suficientes para explicarlo todo y confundirte
Con la nada.

Soy libre, y me temes, te confundo y te mareas,
Me sueñas, pero me alejas, en tus juegos de niña hermosa.
Ojala te siga viendo de mi ventana de hombre libre,
Así conversaremos toda una mañana.
Recorremos libre la campiña provinciana,
Jugaremos a amarnos en el césped de una estancia.
Te dejare con tu sonrisa de señorita rizada,
Te dejare con el calor de hada olvida.
Y al fin cuando camine hacia la nada,
Podré decir con toda fuerza, que mi existencia
Fue justa, que robe pétalos a las hadas,
Que principalmente ame la libertad y
Que VIVO fue el lema de toda la jornada.

Verdad

No hay nada que los ojos no vean,
Ni existen verdades que el alma desconozca
Que por más que las bocas silencien
Los corazones todo lo hablan.

Que se silencien las palabras,
Que se callen las voces,
Que el tiempo se detenga
En un gran abrazo,
Un abrazo tuyo y mío,
En un abrazo del alma.

Que toda la vida sea en un instante
Que toda la piel se reúna en un antes,
Que se junten nuestros corazones
Haciendo un solo pecho, desnudo e inocente,
Para que se comuniquen todo eso que no se dicen,

Y mientras el tiempo vuelve,
Se reirán de si mismos,
Se reirán de historias y circunstancias.
Volverán a la vida luego, para mirarse sin despedirse.

Árbol Seco

Raíces sedienta de agua de la vida.
Alamedas amarillentas, arboledas sin árboles.
Así es un verano cuando hay sequía de colores.
No hay agua en el río de tu vientre,
Ya no agua en el mar de tu falta.
Todo está seco, incluso las flores
Por lo que nos tapamos con la sombra de la nada.